Amores!!!
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En 2010 Courtney Carver decidió que tenía demasiada ropa. Liberar su armario se convirtió para ella en una obsesión. Pero en vez de vender o donar su ropa decidió hacer una revisión exhausta y completa de su ropero bajo la máxima que solo se permitiría tener 33 piezas por temporada (y decidió que cada temporada duraría tres meses). En este registro incluyó zapatos, abrigos, bolsos y otros accesorios y joyas.
“Hice un conteo exacto de 33 piezas, ahí se incluían cuatro pares de zapatos, varias camisetas y pantalones”. Conservó su ropa favorita, las que más le favorecían y decidió que no se permitiría a si misma comprar más ropa en tres meses, a no ser que cambiara un artículo antiguo por lo nuevo que comprara. Es decir, si compraba una camiseta nueva, debía deshacerse o regalar una antigua.
Ella comenzó a documentar todo el proceso en la web Project 333 -33 piezas para 3 meses. Su proyecto era convertir un armario fuera de control en una cápsula con pocas prendas donde todo estuviera a mano y muy visible. Desde entonces ha conseguido que los armarios cápsula se extiendan por Estados Unidos y por buena parte del mundo. “Es interesante ver cómo comprar de más es un problema para mucha gente en el mundo”, explicó Courtney a la revista Business Insider.
El hecho de que varias blogueras con cierto predicamento como Laura Blanton, autora de The Lovely Laura Life decidieran convertir su armario en una cápsula ha ayudado sin dudas a la extensión de la tenencia.
La idea de minimizar el armario les ha seducido porque estaban un poco asustadas con su ritmo de gastos en ropa que en algunas ocasiones se había convertido en su prioridad vital. Estas blogueras publicaron sus 33 piezas y juran que solo se vistieron con eso durante tres meses.
Ahora algunas están pensando en ampliar la idea a 75 piezas para un año.
Para construir un armario cápsula que funcione hay que trabajar primero en la selección de las piezas. Hay que hacer una lista bien pensada y atenerse estrictamente a ella.
El movimiento del armario cápsula se relaciona con la creciente tendencia minimalista que invade a la comunidad de la moda. Otro de sus síntomas es el uso de especies de uniformes para la vida diaria para no tener que perder tiempo cada mañana en elegir modelito.
Los que han experimentado con el armario minimalista aseguran que su vida cambió. Se convirtieron en personas más eficientes y productivas, que “no se dejaban distraer por cosas sin importancia”. Además, aseguran que así reservan su creatividad para proyectos que le interesan mucho más que su propia apariencia diaria.
Intentar convertir tu armario en una cápsula es, en definitiva, buscar la claridad en tu estilo y en tu vida en general. Aseguran los que han probado que consiguieron controlar sus compras por impulso y a descubrir un sentido mucho más personal de la moda y el estilo. Además, ahorraron tiempo y dinero. Por si fuera poco, contra con 33 piezas en el armario les permitió usar mucho más su ropa favorita. Al parecer todo son ventajas, ¿te decides a empezar o eres de las que piensa que más es siempre más?.
En cualquier caso, aquí van algunos consejos para construir un armario cápsula:
- Empieza por quitarte de en medio todo aquello que no te gusta demasiado
- Tienes que decidir que te favorece más y eliminar el resto.
- Considéralo un exceso. Sin nostalgia y sin mirar atrás.
- Empieza desde cero.
- Separa lo que no te sirve y lo que llevas sin ponerte una temporada y mételo en cajas y sepáralo de lo que será tu armario cápsula en los próximos tres meses.
Mb.
